Promover la lectura al ritmo de cada quien
Enviado por Marisol Rodero el 20/10/2017 - 8:51pm.
Creo que no es un secreto que me encanta leer. Mi mama cuenta como de meses pasaba horas dándole la vuelta delicadamente a los libros, mientras personas que me veían pensaban que iba a arrancar las hojas. Aprendí a leer sola a los 3.5 años y desde ese entonces podías encontrarme devorando todo tipo de libros. Naturalmente, cuando tuve hijas, asumí que iban a amar tanto los libros como yo. Me sorprendí que tardaron más en leer que yo,
pero leí varios estudios que aprender a leer era una habilidad física donde cada quien sigue su ritmo natural sin que signifique que es mejor o peor el leer a determinada edad.
Así que respete pacientemente cuando llegará el día en que pudiera compartir con ellas los maravillosos libros que leía a su edad. Cuando les leo a mis hijas en voz alta, gozan de la historia y piden que terminemos el libro, pero para leer individualmente..... no mucho. Leían el tiempo que les determinaba yo para leer en silencio, y no volvían a tocar el libro. No sabía que estaba haciendo mal para que ni una sola de las tres leyera por gusto .... hasta el maravilloso día que una gran amiga le regalo a mi hija de cumpleaños un pequeño libro infantil que adaptaba clásicos a los niños. Mi hija lo leyó en más o menos una hora y me dijo muy entusiasmada que al final del libro venían fotos de otros títulos de la misma serie y me rogó se los consiguiera. Me empezó a dar un poco de pánico. Después de todo, crecí en una familia en la que , si no se leía el libro original, en la lengua original del autor (así fuera castellano antiguo), “no valía para nada”. Más aún, Charlotte Mason aboga por que no demos por nada del mundo versiones digeridas de los libros a los niños, para aumentar su capacidad, concentración, y vocabulario, y claro de paso no volverlos flojos.... así me veía yo tal cual: (Jajajaja) Pero saben que? Recordé lo que todas aconsejamos y pocas veces seguimos....
Cada Niño a su ritmo, todos somos diferentes, hacemos esto para adaptar de la mejor manera la educación a que desarrollen su máximo potencial... etc etc etc.... y que me lanzo a la librería a comprar como 25 libros de la colección.....
Y saben qué pasó? ALGO MARAVILLOSO!!!! mi hija no ha dejado de leer y leer y leer y leer y leer a todas horas! Y bueno, en ese momento decidí que mi prioridad, en realidad, era que mis hijas disfrutaran plenamente el aprender, se deleitarán con los libros y todas la obras maravillosas.... y de paso le pregunte a mi hija mayor si gozaba los libros que le recomendaba, a lo que contesto que unos sí y otros no... (su personalidad es de ser muy responsable y diligente, así que si leía, pero no con tanto gusto...) Y me senté con ella a platicar de cuales eran sus gustos, hasta que elegimos los títulos especiales para ella. La chiquita no tiene tanto problema, parece saber todo por ósmosis y adquiere conocimiento no sé cómo.... es una pequeña sabelotodo , a ver qué tal sus hábitos de lectura cuando crezca :) Para finalizar, recalco que esta realización es solamente para la lectura por diversión, y no para la diaria que hacemos juntos en familia! Ahí si he notado que depende de nosotros como padres lectores el hacer la entonación correcta, captar su atención, y explicar antes o después lo pertinente para que gocen el contenido. Felices lecturas ?